Portrait de la famile Blaichet. Lyon. France. 2001.
Retrato colectivo subjetivo en el que prima la imagen social (máscara, artificio con el que nos mostramos a la sociedad). Cada individuo ha eligido la ropa que le representará, la imagen que quiere mostrar.
En la sociedad contemporánea pensamos que estamos libres de adquiridos. A diferencia de las sociedades tradicionales, en las que el presente no existe; basadas en una idea de precedente (lo que recibimos de nuestros padres y, con ello, de nuestros antepasados) y de proyecto ( lo que transmitiremos a nuestros hijos); en la que el sacrificio o renuncia a la vida en función de lo venidero es la norma; en los sistemas temporales (sociedad contemporánea) no se renuncia al presente, a la vida.
Este surgir del presente; esta necesidad de vivir nos lleva a pensar en consecuencia quienes somos; surge (o se inventa) una idea o concepto que abarque esta necesidad: la identidad ; y, con ella, nos creemos despegados del pasado, del adquirido (somos libres, vivimos un presente que se nos muestra gracias a nuestra individualidad, a nuestra posible identidad).
Olvidamos con ello que, a diferencia de nosotros, el adquirido no nos ha abandonado, está ahí, en nosotros, desde el momento en que nacemos, cuidándonos, protegiéndonos, mintiendonos, encaminándonos...
16/5/10
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario