Serie realizada entre 1995 y 1997. Debe su nombre a un Parque Natural de Extremadura.
Pobre avestruz asexuado que esconde la cabeza en la tierra para no ver, para no reconocer, para no asumir.
Pobre avestruz que descubre el deseo. Sexualidad que te apoderas y juegas con un cuerpo deseoso de placer, deseoso de entender….
Navegar entre dos mundos en apariencia incompatibles (oculto ambiente frente a la cotidianidad). Temor al naufragio. Aferrarse a la tierra. Construcción de un escondite protector en busca de una ficticia comodidad-seguridad. Armario que surges de la no asimilación. Oscuro escondite de invisibilidad, encierro y aislamiento. Lienzo como campo a labrar. Tierra firme sobre la que asentarse; tierra que amar y que se va transformando en cuerpo. Cuerpo empapado de la conflictividad que la ocultación conlleva.
Cuerpo cargado de dolor, soledad y silencio,… pero también impregnado de complicidad, exclusividad y placer. Cuerpos de diferencias. Encuentros de semejanzas.


Melancolía, sexo, sueños : elementos empapados por su color ocre.
Oscuros materiales que traspasan la esencia de la razón, que están ahí; silenciosos, observando al espectador y envolviéndolos en su halo de inquietante duda...
Elementos vivos, comunicantes y mudos a la vez; pigmentados por una historia, quizás; por un eslabón sugerente, por un símbolo entre lo telúrico y lo espiritual, o combinación de ambas, tratando de trasladar ideas humanas y sentimientos en sueños de placer, pero bañados por cierta onda fría, húmeda, ciega, de una oscuridad abierta a sensaciones.
...Solamente dejo que mi cuerpo intercambie ese lenguaje, y permita elaborar reacciones químicas que me produzcan placer."
GABRIEL CORTINA.
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